Alejandra no puede dormir. Cuando la luna y su séquito de estrellas inundan el cielo, el insomnio la ataca sin contemplaciones. Todo está perdido hasta que la joven de profundas ojeras pide ayuda. Consigue salvarla un amigo de aura oscura y enigmática. Lo hace de manera un tanto peculiar… con monstruosas consecuencias. La historia de un mundo donde todo es posible. Una historia de noches, de anonimatos, sombras y tarros de mermelada. Ilustraciones y palabras tejidas cuidadosamente, que cual tela-araña atrapan al lector.La brevedad de un cuento ilustrado compensada con magia, la magia de sus conocimientos. Oníricas páginas para leer, vivir y sentir. Un relato cuya fragancia quedará atrapada en los ojos de usted, sí, sí, de usted, el próximo en descubrir a la dulce guardiana del sueño.